Aprovechando que se ha desarrollado recientemente la FITUR 2023 (Feria Internacional de Turismo), desde Puyalón Viello Aragón replanteamos el uso actual de la Ciudadela de Jaca, que suele estar representada como atractivo turístico del Pirineo aragonés.
Reclamamos que este edificio militar sea entregado a la ciudadanía para su uso social, cultural o turístico. Y su imagen militar y españolista deje de estar incluida como reclamo turístico de Aragón. Este edificio fue mandado edificar por Felipe II a finales de 1592 tras las rebeliones acaecidas con la huida de Antonio Pérez, como señal autoritaria de la Monarquía Hispánica contra Aragón. Y así se ha seguido utilizando hasta la fecha.
La Ciudadela está presidida por una estatua de este rey de los Austrias, encargado de asesinar al Justicia de Aragón y de la eliminación de parte de los fueros aragoneses, presidiendo la fortaleza y sin ninguna bandera de Aragón a la entrada, desobedeciendo las leyes autonómicas.
A partir del 2008 dejó de ser usada por el ejército español, que a pesar de todo no ha cedido su gestión a la ciudad. Como así ocurrió en Pamplona, con una Ciudadela de similares características, ordenada construir también por Felipe II, en 1571. Allí, en 1964 perdió su carácter militar convirtiéndose en un parque con usos culturales. En la actualidad conserva en su interior algunos edificios como Polvorín, Almacenes mixtos y Salas de armas, que pueden ser visitados sin ninguna entrada y sin ningún objetivo militar-nacionalista o propagandístico.
Por el contrario la de Jaca, sigue regentada por el ejército español, donde el coronel Francisco Rubio, ejerce de guía y director museístico desde 2018, y suele aparecer incluso en programas de televisión haciendo gala de su rango o vestido de militar (Un país mágico, Diálogos desde la Fortaleza, Antecessor, …).
La Ciudadela acoge diferentes exposiciones permanentes, como su Museo de Miniaturas Militares, o su exposición “Hechos de armas” en la denominada “Sala de Batallas”, la cual fue inaugurada por el JEME, general Francisco Javier Varela, en 2021.
Además de ello, el Castillo-Fortificación de la Ciudadela organiza diferentes actividades, siempre enfocadas al ejército, las guerras y las armas, que pretende involucrar en la vida cultural y turística de Jaca, y que incluso está adherido a la asociación “Peque visitas” recomendando sus visitas como “BabyFriendly”. Un sutil adoctrinamiento hacia los menores, revestido de toda la pomposidad que rodea al ejército.
Para terminar, distribuye publicidad turística en el extranjero y la vecina Francia, mediante folletos, involucrada en el Camino de Santiago o Turismo rural, siempre con ayuda de Turismo de Aragón, contribuyendo a una imagen errónea de la pacífica Jaca y Aragón como colectividad.
Es intolerable este militarismo como elemento de promoción. Desde las diferentes administraciones, se debería trabajar por una cultura de paz y no de guerra y ello pasa por medidas como las que reclamamos desde Puyalón de Cuchas. Lo demás es blanquear el sufrimiento y la destrucción, además de ejercer una hipocresía absoluta respecto a acuerdos globales como los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
