Aragón sufre la enrestida del españolismo, que se extiende como el agua a través de las grietas de una roca. Es su mismo presidente, Javier Lambán, el adalid de esta tendencia involucionista. No podemos resignarnos a ver como convierten a Aragón en el ideal baturrista pergeñado en el siglo XIX por unas élites que solo querían mantener su posición de privilegio.
Desde Puyalón de cuchas, insistimos este 23 de abril en la vía del soberanismo para ser dueñas de nuestro futuro, sin injerencias. Para que los asuntos de Aragón se decidan aquí. Para que no seamos una colonia extractivista que ve como primero con el agua, y ahora con las placas solares y molinos, llenan su territorio para que esa energía deje su beneficio en otro lugar. Tampoco queremos ser cómplices del anticatalanismo. Nos gustaría ver a Javier Lambán defendiendo con el mismo entusiasmo los intereses de Aragón.
Un Aragón donde se respete sus lenguas y cultura, y dejen de verse como algo folklórico. Charrar, sentir y vivir en un Aragón libre.