A 200 años de la lucha por la primera independencia de los pueblos suramericanos y caribeños de los imperios español y portugués, esos mismos pueblos institucionalizan un organismo de soberanía, independencia y solidaridad (CELAC) rompiendo ataduras y presiones del imperialismo capitalista hegemonizado por la oligarquía yanki.
De entre los elementos que configuran a esta fecha como un momento histórico, no es el menos importante, el hecho de que, a pesar de las diferencias políticas, económicas, ideológicas…, la CELAC se haya constituido con TODOS los estados que conforman esta Región del Planeta. LA PATRIA GRANDE SURAMERICANA Y CARIBEÑA sigue su camino desde bases cada vez más sólidas, ilusionantes y justas.
En estos mismos días se celebran, también en Caracas (Venezuela), cumbres de PETROCARIBE y de la UNASUR. No es ninguna casualidad. Se haría inexplicable la transcendencia de la constitución de la CELAC sin comprender de forma y manera dialéctica los procesos, rítmicamente diferentes, de los distintos pueblos de la PATRIA GRANDE: Impensable que estuviésemos hablando de la CELAC si previamente los pueblos latinoamericanos y caribeños no hubiesen configurado el ALBA, el BANCO DEL SUR, PETROCARIBE…; si no se hubiesen liberado de los alineamientos imperiales como el FONDO MONETARIO INTERNACIONAL (FMI), el BANCO MUNDIAL (BM), el ALCA…; sino hubiesen luchado y sigan haciéndolo por el control de sus recursos naturales; sino hubiesen conseguido la concreción de un bloque político hegemónico en la Región suramericana como es la UNASUR.
Con victorias y derrotas, con aciertos y errores, con avances y retrocesos, pero siempre luchando, la CELAC nace bajo el espíritu de Tupac Amaru, Guaicaipuro, Simón Bolívar, Martí, Sucre, O’Higgins, Artigas, Manuela,…, y también con la de Salvador Allende, el Ché, Kitchner… y tantos y tantos otros miles de luchadores, muertos, desaparecidos anónimos a título individual pero claramente presentes y reconocidos en lo colectivo.
No queremos ni debemos olvidarnos de nadie, entendiendo como cantaba ALI PRIMERA que:
Los que mueren por la vida, no pueden llamarse muertos. Y a partir de este momento es prohibido llorarlos. Que se callen los redobles en todos los campanarios. Vamos pu pal carajo. Que para amanecer no hacen falta gallinas, sino cantar de gallos.
Y junto con esta convicción que manifiesta Alí Primera, queremos hacer un reconocimiento a los que como ejemplos vivientes de su compromiso y bondad al comandante Fidel y a Raúl Castro actual presidente de la república cubana y presente físicamente en esta cumbre de la CELAC; lo mismo que el Frente Sandinista y el conjunto del pueblo nicaragüense en la persona de su líder Daniel Ortega; al pueblo uruguayo y su presidente el ‘Pepe’ Mujica; a Correa, Evo Morales, Cristina Fernández, Dilma Roussef, Lugo…, y al comandante Hugo Chávez, Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, como anfitrión y principal impulsor de esta política de solidaridad, soberanía, independencia, inclusión y unión sobre la que se asienta la CELAC.
En medio de la crisis sistémica, estructural, del sistema capitalista en su fase imperialista, hegemonizado a nivel mundial por la oligarquía estadounidense; la CELAC es la visualización de un espacio de poder socialista, demostrativo de que es posible conseguir unas sociedades realmente democráticas, justas, solidarias, y dignas.
La CELAC no es una realidad defensiva, que también, sino que es la demostración positiva de que los pueblos no tienen porque doblegarse ante las ansias de acumulación de la oligarquía imperialista.
La CELAC es democracia. Transcendiendo a la mera representación, avanzando por la senda del poder popular, por el camino de la democracia participativa y protagónica.
La CELAC es diversidad de ideologías, de políticas, de economías; y es de la misma manera y a la vez unión e inclusión de voluntades, experiencias, recursos…
La CELAC es solidaridad entre iguales aunque diferentes. Es empezar a hacer práctico: “a cada uno según sus necesidades, de cada cual según sus posibilidades”.
La CELAC es por fin, y sin acabar su repertorio: CONCIENCIA DE RECUERDO, VOLUNTAD DE RECONOCIMIENTO Y ESPERANZA DE FUTURO.
Por todo ello, Puyalón de Cuchas recibe con agrado e ilusión la constitución de la CELAC. Cualquier espacio regional político y económico que rompa la hegemonía del imperio es estratégicamente muy importante.
Aragón, a 11 de Diciembre de 2011
Puyalón de Cuchas
Organización Política de la Izquierda Independentista de Aragón
]]>