Desde Puyalón de Cuchas os queremos hacer llegar nuestro más firme apoyo, ante el juicio que ya hoy, viernes, hacéis frente las once personas que aquel día de enero de hace dos años, hace casi justos dos años, os encaramasteis al tejado de la antigua cárcel de Torrero para oponeros al desalojo decretado por el Poder. Aquel día, la Delegación del Gobierno español en Aragón y el Ayuntamiento de Zaragoza decidieron que ya estaba bien de esperanza, de lucha y de espacios libres y autogestionados en Torrero, y decidieron cortar por lo sano, por lo más sano (vosotras), con ese espacio que llevabais ya tiempo impulsando, mediante un despliegue policial y una violencia desmedidos contra okupas y vecinas.
Y ahora, encima, os juzgan. 20.000 € quieren que paguen los okupas de Torrero, del Kike Mur, por no ir a la cárcel; y ahí se ve de qué va el sistema judicial y penal español: quien tiene dinero no va a la cárcel, literalmente. Pues bien, ahí vamos a estar, para recordaros a vosotras, y esos grises funcionarios de la violencia y la coerción, que toda esa violencia y esa coerción no vale nada contra la solidaridad.
Porque, si bien es cierto que aquel día ganaron, dos días después, cuando volvimos libres a la cárcel, ganamos nosotras, la asamblea de la Okupa y toda su gente, las vecinas de Torrero y todas las que os apoyamos y creemos que la okupación y la autogestión nos abren puertas hacia un mundo nuevo, más justo y solidario. Ganamos, ciertamente, cuando la policía se iba entre el pasillo que le hacíamos las manifestantes, pero eso tuvo un precio, que es el rencor, manifestado ahora en este juicio insultante a las 11 del tejado. Manifestado, también, en el ensañamiento bellochiano de mantener esta demanda y en la cobardía política de los grupos de izquierda del ayuntamiento de no hacer lo suficiente para que se os levante esta acusación. Y es que todo esto viene de la misma causa: no sois culpables de “desórdenes”, no sois “usurpadoras”, sino que sois culpables -y orgullosas imaginamos que estaréis-, de violentar su calma y su orden, capitalista y autoritario. Así que, como en Artieda, como en la lucha obrera y como en cualquier caso de represión del sistema contra las que luchan, recibid toda nuestra solidaridad, nuestro apoyo y nuestro afecto.
¡TORRERO OKUPA Y OBRERO SIEMPRE!
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